El Papa Francisco
escribió esta Exhortación Apostólica para toda la Iglesia de Cristo. Es un
texto valiosísimo, de fácil lectura, de clara comprensión para nuestras mentes
porque el Papa nos escribe de hermano a hermano… sin teorías en el aire ni
términos teológicos que no nos fueran aplicables a nuestra vida.
El lector se podrá hacer
dos preguntas mientras transcurra la lectura de esta carta pastoral: ¿Qué es
ser santo? ¿Para qué ser santos?
A la primera pregunta su
Santidad responderá: ser santos es descubrir que tu vida tiene sentido porque
tienes una misión en este mundo, es reflejar el Evangelio (las palabras y la
vida de Jesús) con tu vida; eso forja en ti una espiritualidad que cada vez se
llena más y más del Amor de Dios, del Espíritu Santo que anima tu vida. Y
puedes ser santo no a pesar, sino “con” tus debilidades, pecados… siempre que
estés abierto a su Gracia que te permitirá convertirte más y más a semejanza de
su corazón misericordioso.
A la segunda pregunta,
sorprendentemente la respuesta es más que práctica, profunda y cierta: ¡para
estar más vivos… para ser más humanos!
Vale la pena leerla,
meditarla y vivirla. Vale la pena responder a este desafío de ser santos en el
mundo actual. No es un desafío ni riesgoso, ni peligroso… ¡es apasionante!
Padre
Fernando Arias.
Boletín de junio